Vasija de siembra simple tomada en cultivo en el Río Narganá mientras caminaba con Rubén Pérez Kantule y otros indígenas allí.
Según Pérez, estos palos eran utilizados por los indios cunas para sembrar maíz, colocando cuatro semillas en el recipiente de aproximadamente 1 dm. Agujeros profundos hechos con el palo en el terreno quemado después de una quema previa. No se utiliza para las plantas de coco en las islas, sino sólo en el continente. El valor como fertilizante es puesto en duda por el dr. Arrenio.
Ver nota hasta 1370.